miércoles, 5 de junio de 2013

Monasterio de los Jerónimos, Belém, Portugal



El Monasterio de los Jerónimos de Santa María de Belém es un antiguo monasterio de la Orden de San Jerónimo, que se ubica en el barrio de Belém, en Lisboa, Portugal. Fue levantado sobre el enclave de la Ermida do Restelo, en lo que fue la playa de Restelo, ermita fundada por Enrique el Navegante, y en la cual Vasco de Gama y sus hombres pasaron la noche en oración antes de partir hacia la India. 

Diseñado en estilo manuelino por el arquitecto Juan de Castillo, fue encargado por el rey Manuel I de Portugal para conmemorar el afortunado regreso de la India de Vasco da Gama. La primera etapa constructiva de la iglesia comienza en 1514 y fue ampliándose y modificándose hasta el siglo XX. Se financió gracias al 5% de los impuestos obtenidos de las especies orientales, a excepción de los de la pimienta, la canela y el clavo, cuyas rentas iban directamente a la Corona. 

El estilo manuelino es un estilo arquitectónico portugués que se desarrolló en el reinado de Manuel I de Portugal. Es una variación portuguesa del estilo gótico final, así como del arte mudéjar, marcado por una sistematización de motivos iconográficos propios, de gran porte, simbolizando el poder regio. 

El estilo manuelino se caracteriza por la mezcla de motivos arquitectónicos y decorativos del gótico tardío y del renacimiento. Destacan los portales principal y lateral, el interior de la iglesia y el magnífico claustro. Las capillas de las iglesias fueron remodeladas en puro estilo renacentista en la segunda mitad del siglo XVI y contienen las arcas funerarias de Manuel I y su familia, además de otros reyes de Portugal. 

En los Jerónimos se hallan las tumbas del navegador Vasco da Gama y del poeta Luis de Camoes. En una capilla del claustro descansan, desde 1985, los restos del escritor Fernando Pessoa. En un anexo construido en 1850, se ubica el Museo Nacional de Arqueología, mientras que el Museu da Marihna se encuentra en el ala oeste. En diciembre del 2007 se firmó en este monasterio el Tratado de Lisboa, un acuerdo de la Unión europea que sustituye la Constitución Europea y reforma los tratados que estaban vigentes. 




La primera etapa constructiva se encargó al arquitecto de origen francés, Diogo Boytac, autor de la antigua iglesia de Jesús de Setúbal. Su proyecto no fue llevado a cabo, pues fue sustituido por el siguiente arquitecto, Juan del Castillo. Boytac trabajó en el edificio entre los años 1514 y 1516. Planificó la obra siguiendo las normas imperantes del momento por toda Europa del gótico final. 

En 1516 le sucedió en las obras Juan de Castillo, de origen español. Se sabe que trabajó en España hasta 1506. Con él la obra comienza en su mayor dimensión y se corresponde con las mejores partes del edificio de estilo manuelino, conjugándolo con el plateresco y estructuras renacentistas. Bajo su dirección se construyó la iglesia con las más osadas bóvedas del claustro, la sacristía, la sala capìtular y el refectorio.

A la muerte del rey Manuel (1521) las obras no se paralizaron y continuaron en tiempos del rey Juan III, hasta que, más tarde, continuaron con el arquitecto español DIego de Torralva, en 1544. La diferencia de estilo se muestra sobre todo en el gran friso alto realizado por Diego de la Zarza y en la introducción de los medallones vueltos de lado.

Los críticos de arte consideran este monasterio como la joya del estilo manuelino y uno de los monumentos más importantes de Lisboa y Portugal. Fue diseñado por el arquitecto Juan del Castillo que se inspiró en el estilo tardogótico aun vigente con la introducción de la decoración plateresca y elementos renacentistas. Está dividida verticalmente en dos cuerpos. El de abajo consta de un gran arco conopial que cobija dos puertas de acceso. En el tímpano se pueden ver unos bajorrelieves con representaciones de la vida de San Jerónimo y el escudo portugués. La parte superior presenta una ventana de arco de medio punto. Ambos cuerpos están limitados por ornamentación tardogótica, con estatuas bajo doseletes y esbeltos pináculos. 




El interior es muy amplio y luminoso, con una sola nave de planta salón y una abigarrada decoración manuelina. La bóveda del crucero es grandiosa y cubre una superficie de 29 por 19 metros, sin apoyos centrales y con una compleja red de nervaduras. Fue diseñada por Juan del Castillo en 1522, así como la bóveda, realizada en 1520. La capilla mayor fue reformada posteriormente por el maestro Jerónimo Ruao en estilo renacentista avanzado con el mismo estilo que la capilla de la Iglesia del Monasterio de El Escorial. En el retablo se destaca el sagrario, pieza de orfebrería portuguesa del siglo XVIII. En esta capilla se encuentran apoyados sobre leones las tumbas del rey Manuel I y su esposa María y de Joao III y Catalina de Austria. 





  • Sacristía: Diseñada por Juan Castillo en estilo manuelino. Su bóveda se apoya en una columna situada en el centro. Guarda una buena colección de pinturas con la vida de san Jerónimo, de distintos artistas manieristas portugueses. 
  • En otros puntos de la iglesia se encuentran las tumbas de Vasco da Gama, con símbolos náuticos, y la del rey Sebastián que está vacía. Este joven personaje nunca regresó de la Batalla de Alcazarquivir en 1578.

El claustro se encuentra situado junto a la nave norte del templo. Fue realizado entre 1517 y 1519 con varias contratas y subcontratas, dando lugar a un resultado final de armonía y uniformidad. 

Todo el claustro está ampliamente decorado con motivos manuelinos. Desde el piso de arriba se puede acceder al coro alto de la iglesia, que fue construido por Torralvaen el siglo XVI. En él se encuentra una importante sillería, también del siglo XVI.

El refectorio es bastante amplio, cubierto por una bóveda nervada y su realización fue delegada a Leonardo Vaz bajo los diseños de Castillo. Sus paredes están decorados con la línea de una soga y con azulejos del siglo XVIII. En la sala capitular (también diseñada por Juan del Castillo) se encuentra la tumba de Alexandre Herculiano (1810 - 1877), historiador y primer alcalde de Belém.










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