miércoles, 2 de enero de 2013

Andrea Palladio/Villas Palladianas



Andrea di Pietro de la Góngora conocido con el nombre de Andrea Palladio (Padua 1508 - Maser, 1580) fue un importante arquitecto de la República de Venecia. Trabajó fundamentalmente en la ciudad de Venecia y sus alrededores. Se lo considera un autor del manierismo, sus villas campestres y otras obras han influido de manera importante en la arquitectura del Neoclasicismo.

Nace el 30 de noviembre de 1508 en Padua. Comienza su formación como aprendiz a la edad de trece años en el taller del arquitecto y maestro cantero Bartolomeo Cavazza da Sossano. En 1524 pasa a Vicenza, donde es admitido en el taller de Giovanni di Giacomo da Porlezza. En 1534 alcanza el grado de oficial en dicho taller.

A principios de 1538 conoce al conde Giangiorgio Trissino, intelectual reconocido de la época, a través del cual se relaciona con los más notables personajes de la ciudad y gracias a quien puede completar su formación. Es, a partir de sus cuarenta años, que se lo conoce como arquitecto. Durante esos años realiza varias villas señoriales en VIcenza y se le adjudica el Palacio Thiene. En 1549 es nombrado arquitecto mayor de la Basílica (o Palazzo della Ragione) y toma a su cargo la realización de las logias. A la muerte de Trissino, y bajo la protección de su nuevo mentor, el veneciano Daniele Barbero, Palladio extiende su práctica a la ciudad de los canales. 

En Venecia se dedica especialmente a la arquitectura religiosa, mientras que por todo el valle del Véneto aparecen las lujosas residencias para aristócratas vicentinos y venecianos que lo han hecho célebre. 

En 1554 publica L'Antichità di Roma, basada en sus viajes a la ciudad eterna, en 1541 y en 1545. En 1570, como fruto de un estudio profundo de las ruinas y de los tratados de León Battista Alberti y del romano Vitrubio, publica en Venecia su famoso tratado I Quattro Libri dell'Archittetura (Los Cuatro Libros de la Arquitectura), un tratado muy influyente, que logró codificar el vocabulario de la nueva arquitectura clásica internacional. 





En 1556 funda en Vicenza la Academia Olímpica. En 1566 es admitido como miembro en la Accademia del Disegno (Galería de la Academia) de Florencia. En 1570 ocupa el cargo de arquitecto consejero de Venecia sucediendo a Jacopo Sansovino. Sus últimas obras son el Teatro Olímpico y la capilla para la familia Barbaro, en Maser. Muere en Vicenza, el 19 de agosto de 1580, a la edad de 71 años. 

Las villas paladianas son un conjunto de villas localizadas en la región del Vénto, concentradas en su mayor parte en la provincia de Vicenza, edificadas en torno a la mitad del siglo XVI por el arquitecto Andrea Palladio para las familias importantes del lugar. 

Estas villas se distinguen de las villas romanas y de las villas mediceas toscanas ya que no se destinaban solo al ocio de sus propietarios, sino que también eran centros de producción. Normalmente estaban rodeadas de grandes extensiones de campos y viñedos, e incluían almacenes, establos y depósitos para el trabajo del campo.

La reputación de Palladio a los inicios, e incluso después de su muerte, se funda en su habilidad como diseñador de villas. Durante la guerra de la Liga de Cambrai (1509 - 1517) resultaron muy dañadas las casas y las infraestructuras rurales. La recuperación de los niveles de prosperidad precedentes en la campaña fue probablemente lento, y data de los años 1540, con el crecimiento del mercado urbano de los productos alimenticios, y la decisión, a nivel gubernamental, de liberar Venecia y el Véneto, de la dependencia del cereal importado, especialmente aquel que provenía del imperio otomano. Durante decenios los propietarios de terrenos habían adquirido constantemente, bajo el estable gobierno veneciano, pequeñas parcelas y habían consolidado sus dominios no solo a través de la adquisición, sino también el intercambio de poderes con otros propietarios. 




Las villas de Palladio respondían a las necesidades de un nuevo tipo de residencia rural. Sus diseños reconocen que no era necesario un gran palacio en el campo modelado directamente sobre aquellos de la ciudad, como lo son muchas villas de finales del siglo XVI. Cualquiera más pequeña, generalmente de una sola planta principal habitable, era apta como centro para controlar la actividad productva de la que derivaba la mayor parte del rédito de su propietario, para impresionar a los vecinos y para entretener a huéspedes importantes. Estas residencias, a menudo más pequeñas que las villas precedentes, eran igualmente eficaces a fin de establecer una presencia social y política en el campo y estaban adaptadas para el reposo, la caza y para huir de la ciudad. 

Las fachadas, dominadas por frontones, normalmente decorados con los símbolos del propietario, anunciaban una poderosa presencia en un territorio vasto y llano, y no tenían necesidad, para ser visibles, de tener una altura similar a los palacios ciudadanos. Sus logias ofrecían un lugar placentero, a la sombra, para entretenerse, conversar o la ejecución musical, actividades que se pueden observar en las decoraciones de la villa. Un buen ejemplo de ello es la Villa Caldogno.

En el interior Palladio distribuía las funciones vertical u horizontalmente. Las cocinas, la despensa y las bodegas se encontraban en la planta baja: el amplio espacio bajo el techo se empleaba para conservar el grano que servía asimismo como aislante de los ambientes habitables inferiores. En la planta principal, habitada por la familia  y sus invitados, las estancias más públicas (logia y salón) se encontraban sobre el eje central, mientras que a derecha e izquierda se iban abriendo habitaciones de distinto tamaño, desde las grandes cámaras rectangulares, a través de estancias cuadradas de dimensiones medias, hasta las pequeñas rectangulares, utilizadas a veces por los propietarios como estudios de administración. 





Las habitaciones de los propietarios no eran la única construcción de la que Palladio era responsable. Las villas, a pesar de su apariencia no fortificada y sus logias abiertas, descendían directamente de los castillos y estaban rodeados por un patio cerrado por un muro que lo dotaba de la necesaria protección de los bandidos y malhechores. El patio contenía graneros, palomares, hornos para el pan, gallineros, habitaciones para los campesinos y los servidores domésticos, estancias para hacer el queso y bodegas para exprimir la uva. Desde el siglo XV se solía crear un patio delante de la casa, con un pozo separado con respecto al patio de servicio, con sus graneros, los animales y los espacios para cribar el grano. Jardines, huertos de verduras y de especias, estanques para peces y un gran huerto de árboles frutales estaban reagrupados en el interior del muro que rodeaba el lugar.

En sus diseños, Palladio buscó coordinar todos estos elementos diferentes, que anteriormente no estaban colocados en consideración con la simetría visual y la jerarquía arquitectónica, sino más bien a menudo en base a la forma del área disponible, generalmente delimitada por cursos de agua. En su obra Quattro librri dell'archittetura, publicada en Venecia en 1570, afirma que los graneros debían estar situados hacia el sur, para que la paja estuviera seca, a fin de no pudrirse.

Andrea Palladio encontró inspiración en los grandes complejos que se parecían a las casas de campo rodeadas por sus dependecias. Por ejemplo, los graneros curvos, que recorren el costado de la imponente fachada de la Villa Badoer recordaba a aquellas visibles en el foto de Augusto. En su tratado Palladio muestra el sistema de villas simétricas, aunque era consciente que en caso de no poder exponer ambos lados de los graneros al sur, el complejo nunca sería construido de manera simétrica. 



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